Las salamandras son los anfibios más grandes, todas las familias de las salamandras se agrupan bajo el nombre científico de Urodela, se conocen 269 especies diferentes de salamandras.
Estos animales tienen una coloración negra y amarilla muy llamativa que advierte a sus depredadores lo venenosa de su piel y que su sabor es desagradable, tiene cuatro patas y cola larga, en su estadio de larva está en medio acuático y en la adultez pasa al medio terrestre y vuelven al agua para reproducirse.
En la naturaleza se les encuentra de forma solitaria, tienen hábitos nocturnos, llegan a pesar 20 gramos y a medir 20 centímetros. Se mueven con lentitud y su expectativa de vida es de 55 años. Las salamandras tienen la capacidad de regenerar extremidades perdidas, también otras partes de su cuerpo. Su olfato le sirve para mantener su territorio y reconocer a sus depredadores.
Las salamandras al sentirse amenazadas liberan una toxina venenosa a través de la piel que es irritante y tiene mal sabor, este mecanismo de defensa ha hecho que puedan defenderse ante cualquier depredador. Este caso es raro dentro de la naturaleza, ya que el veneno no está dentro de una glándula sino está relacionado con la piel. En todo caso el veneno no es mortal para los seres humanos.
Un mecanismo interesante de supervivencia de las salamandras es la “autonomía caudal”, al verse atacadas por algún depredador estas desprenden su cola, la cual queda en movimiento, distrayendo al adversario y le da la oportunidad de escapar.
Este mecanismo de regeneración sigue siendo estudiado por los científicos para luego aplicarlo en humanos.
¿Dónde habitan las salamandras?
Las salamandras se pueden encontrar en África del Norte, Europa, Asia, Oriente medio, América Central y del Sur, especialmente en los bosques caducos que renuevan sus hojas anualmente en la temporada de frío. La salamandra gusta de lugares húmedos, cerca de charcos o lagos. La piel de la salamandra es permeable, haciéndola dependiente de hábitats cerca del agua o ambientes húmedos y frescos.
Cuando el clima está seco, la salamandra suele esconderse debajo de troncos u hojas, esperando que refresque el ambiente. Un mecanismo interesante de supervivencia de las salamandras es la “autonomía caudal”, al verse atacadas por algún depredador
Este tipo de animalito es resistente a temperaturas de 35ºC bajo cero, encontrándose especies en Siberia. También hiberna entre los meses de octubre a marzo y cuando hace mucho calor en su hábitat baja su actividad metabólica.
Otra particularidad de las salamandras es que vuelven al mismo lugar de hibernación durante muchos años seguidos, revisando constantemente el lugar elegido.
Alimentación de las salamandras
Las salamandras son carnívoras, entre los alimentos que consume se encuentran los caracoles, las babosas, lombrices, escarabajos, algunos insectos de cuerpo blando, arañas y miriápodos (ciempiés y milpiés).
Los ojos de las salamandras están adaptados para la visión nocturna, poseen la capacidad de ver las presas a distancias largas. Una vez divisada la presa, las salamandras terrestres utilizan su lengua pegajosa para atraparla.